Eagles,
In my final address this school year, I want to lay the first stone on the road to the next.
Today, I attended a professional development session for principals that focused on reflecting on our work, the work of our teams, the state of educational leadership, and the profession across the state. Inevitably, our conversation drifted to standardized state tests and the accountability they and their high stakes are meant to inform. The nature of how the state examines students' abilities has evolved year after year in style, substance, scale, and weight, and so have the accountability metrics for public schools.
The test has undergone a significant shift in recent years, becoming heavily reading-dependent and now heavily writing-dependent. This change has been implemented across all grade levels, introducing crucial skills that students need to be successful. While this change is beneficial for students starting in kindergarten, it poses a challenge for students in advanced grades. They are now faced with a test that requires more than one to two years of experience under the new requirements, without the benefit of years of incremental and scaffolded instruction. This lack of a strong foundation for their understanding is a significant hurdle.
Standardized test performance has dropped statewide. Where the thought of creating writing-dependent tests was inconceivable, artificial intelligence makes the millions of students taking the test a quick and inexpensive proposition. Now, writing is part of every level and subject of the exam, and the nature and direction of teaching have taken a sharp turn. Most fairly, it is a reasonable and necessary change but unsupported. As in a vehicle moving at speed, quick changes can have drastic consequences, whiplash being the least of them.
All this is to say that the nature of teaching and learning is changing for the better but quickly. It's not just a change for students, but for all of us. We, as principals and educators, MUST CHANGE WITH IT, and our role in this adaptation is crucial.
Expectations for students, as well as those for administration and teachers, will change. These changes will require a proactive approach in refining instructional planning, delivery practices, and responses when students need to meet standards. It is time now, more than ever, for students to put their hands on the wheel of their education, and for us to guide them.
These changes may cause stress for some students, but our teachers and staff will support them every step of the way. In the coming months, we will work to provide you with detailed information about how you can support your students through the transition. Through the principal's coffees, open houses, IB nights, and other gatherings, we will help our community better understand the new testing requirements, the steps we will take, and how you can support your students at home. We can't do it without you!
The quote, "The measure of success is not whether you have a tough problem to deal with, but whether it is the same problem you had last year," is attributed to John Foster Dulles, the United States Secretary of State under President Dwight D. Eisenhower.
Through reflection and open and honest discourse, we make sure that the problems we face today do not persist year after year. These changes will require a concerted effort from all stakeholders. We will make readers and writers of all of our students.
Rest assured that WE, the Eagles, are up to the challenge.
Yours most sincerely and respectfully,
Luis De La Garza
Head of School
Woodlawn Academy
_____________________________________________________________________________________
Águilas,
En mi último discurso de este año escolar, quiero poner la primera piedra en el camino hacia el próximo.
Hoy asistí a una sesión de desarrollo profesional para directores que se centró en reflexionar sobre nuestro trabajo, el trabajo de nuestros equipos, el estado del liderazgo educativo y la profesión en todo el estado. Inevitablemente, nuestra conversación se desvió hacia las pruebas estandarizadas estatales y la responsabilidad que ellas y sus altas expectativas están destinadas a informar. La naturaleza de cómo el estado examina las habilidades de los estudiantes ha evolucionado año tras año en estilo, sustancia, escala y peso, y también lo han hecho las métricas de responsabilidad para las escuelas públicas.
La prueba ha experimentado un cambio significativo en los últimos años, volviéndose muy dependiente de la lectura y ahora muy dependiente de la escritura. Este cambio se ha implementado en todos los niveles de grado, introduciendo habilidades cruciales que los estudiantes necesitan para tener éxito. Si bien este cambio es beneficioso para los estudiantes que comienzan en jardín de infantes, plantea un desafío para los estudiantes de grados avanzados. Ahora se enfrentan a una prueba que requiere más de uno o dos años de experiencia bajo los nuevos requisitos, sin el beneficio de años de instrucción incremental y escalonada. Esta falta de una base sólida para su comprensión es un obstáculo significativo.
El rendimiento en las pruebas estandarizadas ha caído en todo el estado. Donde la idea de crear pruebas dependientes de la escritura era inconcebible, la inteligencia artificial hace que los millones de estudiantes que toman la prueba sean una propuesta rápida y económica. Ahora, la escritura es parte de todos los niveles y materias del examen, y la naturaleza y dirección de la enseñanza han dado un giro brusco. En términos justos, es un cambio razonable y necesario, pero no respaldado. Como en un vehículo en movimiento a gran velocidad, los cambios rápidos pueden tener consecuencias drásticas, el latigazo cervical siendo el menor de ellos.
Todo esto es para decir que la naturaleza de la enseñanza y el aprendizaje está cambiando para mejor, pero rápidamente. No es solo un cambio para los estudiantes, sino para todos nosotros. Nosotros, como directores y educadores, DEBEMOS CAMBIAR CON ÉL, y nuestro papel en esta adaptación es crucial.
Las expectativas para los estudiantes, así como para la administración y los maestros, cambiarán. Estos cambios requerirán un enfoque proactivo para refinar la planificación instructiva, las prácticas de enseñanza y las respuestas cuando los estudiantes necesiten cumplir con los estándares. Es el momento, ahora más que nunca, de que los estudiantes pongan sus manos en el volante de su educación y nosotros los guiemos.
Estos cambios pueden causar estrés a algunos estudiantes, pero nuestros maestros y personal los apoyarán en cada paso del camino. En los próximos meses, trabajaremos para proporcionarles información detallada sobre cómo pueden apoyar a sus estudiantes durante la transición. A través de los cafés con el director, las jornadas de puertas abiertas, las noches del IB y otros encuentros, ayudaremos a nuestra comunidad a comprender mejor los nuevos requisitos de las pruebas, los pasos que tomaremos y cómo pueden apoyar a sus estudiantes en casa. ¡No podemos hacerlo sin ustedes!
La cita, "La medida del éxito no es si tienes un problema difícil que enfrentar, sino si es el mismo problema que tuviste el año pasado," se atribuye a John Foster Dulles, Secretario de Estado de los Estados Unidos bajo el presidente Dwight D. Eisenhower.
A través de la reflexión y el discurso abierto y honesto, nos aseguramos de que los problemas que enfrentamos hoy no persistan año tras año. Estos cambios requerirán un esfuerzo concertado de todos los interesados. Haremos lectores y escritores de todos nuestros estudiantes.
Tengan la seguridad de que NOSOTROS, los Águilas, estamos a la altura del desafío.
Suyo, con más sinceridad y respeto,
Luis De La Garza
Director de la Escuela
Woodlawn Academy
